domingo, 9 de octubre de 2016

El juego de La bicicleta de los Huanca

La firma Aynibit desarrolló el juego, que está basado en la exitosa cinta que produjo en los 90 el cineasta Roberto Calasich. La trama de aquella historia contaba cómo una bicicleta desató la rivalidad de la familia Choque y los Huanca.

"La bicicleta de los Huanca es un videojuego en el que el usuario debe dominar sus habilidades de ciclista para superar obstáculos y recoger tesoros en niveles llenos de peligros”, explica el desarrollador Wilson Quispe.

El juego tiene 2O niveles. En cada uno, el usuario debe ahorrar un monto determinado para "desbloquear” atuendos típicos del personaje principal, Eleuterio. "Estamos hablando de cuatro vestimentas: 1) normal sin poncho, 2) Con traje, 3) con poncho, y 4) Vestido de cholita”, agrega Quispe.

¿Cómo nació la idea?

"Nosotros estábamos -y estamos- desarrollando un videojuego en 3D y entonces un día, entro a mi cuenta de Facebook personal y sorpresivamente tengo un mensaje de Roberto Calasich. Entonces, él me dice si podríamos inmortalizar a la bicicleta de los Huanca en videojuego. Nosotros como Aynibit decidimos hacerlo”, comenta Quispe.

Este desarrollador informa que la app se estrenará junto a La bicicleta de los Huanca II. El videojuego podrá ser descargado de forma gratuita del Play Store.

La secuela, denominada como La motoneta de los Choque, se comenzó a rodar en 2014 y narra -según versiones de prensa- la disputa entre las nietas de Eleuterio Huanca y Silverio Choque, personajes centrales de La bicicleta de los Huanca. Ambas mujeres pelean por el amor de un cantante de Achacachi.

Quispe informa que quienes descarguen el videojuego podrán acceder a sorpresas. "Por ejemplo, al finalizar todos los niveles automáticamente desbloquearás la motoneta de los Choque”, adelanta.

De sus seguidores
Este emprendedor afirma que algunos seguidores de Aynibit -a quienes la firma llama Aynilovers o aynibiters- "podrán disfrutar del videojuego incluso antes del lanzamiento”. También comenta que en su página de Facebook (https://www.facebook.com/Aynibit) divulgan adelantos del proyecto, como gráficas.

Wilson Quispe es oriundo de Viacha. Lidera este emprendimiento desde que se fundó en enero pasado. En la actualidad, estudia Ingeniería de Sistemas de la Universidad Pública de El Alto. Tiene 21 años.

Desarrolló juegos como Manq’asa Jalasa (comiendo y corriendo), más conocido como el Mario Bros a la boliviana, T’ijuña Kart (un videojuego donde compiten en autos de carreras Evo Morales, Soledad Chapetón y Samuel Doria Medina).


Punto de vista
Tonny López Ciberactivista



"El videojuego me parece innovador”

Es un proyecto innovador y muy bueno. Considero que es una de las iniciativas de muchos jóvenes que están viendo espacios, focos, posibilidades, campos.

No obstante, hace poco conversaba con estudiantes de la UPEA (Universidad Pública de El Alto), que armaron un grupo de científicos, los muchachos que han destacado en los medios de comunicación por sus proyectos. Han empezado a reflexionar y detectaron un gran problema, que Wilson Quispe de Aynibit debe afrontar.

Hablando con estos jóvenes, ellos decían que si desarrollan este tipo de innovaciones es porque ellos se lo propusieron y lo hacen porque quieren hacerlo, lo puede hacer, y, claro, le echan muchas ganas, aunque no tienen apoyo.

Ahora bien, ellos comentaban también que nadie les había colaborado, pero cosechan logros. Si mejoraran las condiciones, si tuvieran asesoramiento y apoyo ¿con qué nos sorprenderían?

Me comentaban, por ejemplo, que en ciertos colegios, las computadoras Quipus las tienen guardadas con llaves y todavía no pueden ni utilizarlas. Así que ello se convierte en una limitante terrible.

Se requiere romper la burocracia en varios centros de educación, porque para pedir una computadora, decían, se requiere autorización o permiso; y también pienso que debería haber alguna institución que dé asesoramiento y apoyo, ya sea económico o social. Esto para que más jóvenes empiecen a generar este tipo de productos. Hasta la fecha me comentan que no hay.


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