Desde hace muchos años que disfrutamos de las consolas videojugadoras en diferentes generaciones y siempre hemos evidenciado la evolución en la dinámica de la jugabilidad en cada sistema, con la llegada de la última generación videojugadora encabezada por PlayStation 4 y Xbox One, se ha ingresado en una etapa de alta interacción con Internet que se había empezado a observar con la anterior generación y muy poco con la generación de PlayStation 2 y Nintendo Game Cube, ahora no te sirve de nada tener una consola de nueva generación sino tienes conexión de Internet, con ello accederás a un espectáculo completo multimedia, es decir puedes ver televisión digital, acceder a la página web de tu consola para descargas de demos, compras digitales de programas, juegos y acceso a diferentes formatos comunicacionales de información videojugadora, como revistas digitales, radios, videos, etc.
Este aspecto y característica de la nueva generación consolera sorprende mucho en nuestro país, por las condiciones económicas, la velocidad de nuestro servicio de Internet y el alto costo de estos equipos videojugadores, es importante destacar que la jugabilidad ha cambiado mucho en todo sentido, porque la conexión de Internet permite que el videojugador mida sus condiciones con otros videojugadores del mundo y ya no solo frente al CPU, las consolas ahora ya no se limitan al uso del videojuego, se han convertido en completos sistemas de entretenimiento audiovisual que brindan diferentes opciones de distracción e información a todos sus usuarios.
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