Piques» de adrenalina a 200 km/h «NEED FOR SPEED: RIVALS»

Tomar el control, coger el volante, ponerse a 100, a 200, a 220... y seguir. Soltar adrenalina, pero primero buscarla hasta encontrarla. La vida necesita conflictos para superarse. Ese parece ser el ingrediente del nuevo videojuego «Need for speed: Rivals», que inaugura un nuevo sistema de puntuación mediante el cual se arriesgan todos los puntos obtenidos en las partidas y el jugador puede probar suerte con dos bandos bien distintos, el de los corredores o patrullar a manos de un coche de policía dispuesto a sumar detenciones. El objetivo es aspirar a más mejoras, más recompensas y a subir de nivel más rápidamente. La nueva entrega del simulador de velocidad amplía las miras e incorpora la posibilidad de controlar a pilotos o a policías. Las persecuciones generan gran tensión cuando enciendes las luces. Estás esperando, conduciendo de aquí en el condado de Redview donde se han ampliado los territorios y apunta más a un mundo abierto que un juego de carreras. Se mezcla, por tanto, las carreteras con paisajes abiertos. La rivalidad nunca acaba. Y las batallas se libran en dos bandos diferenciados, con objetivos bien distintos. Todos compiten con los coches más rápidos y potentes pero la destreza del jugador afecta, cómo no, a la conducción. Sin ser totalmente realista, las partidas se vuelven interesantes y emocionantes. Estás ahí esperando a encontrar un motivo por el que quemar rueda. Y sí, en pocos kilómetros lo encuentras. Los rivales que te encuentras garantizan una sensación continua de excitación y nervios. Este nuevo título, desarrollado por Ghosts Games y distribuido por Electronics Arts, es dinámico y rápido, aunque si bien es cierto que la falta de un objetivo claro -hay que buscarlo- puede desmotivar a más de uno. Como corredor, el jugador alberga un amplio abanico de trucos bajo la manga, como ondas de choque que repelen a los vehículos cercanos, la utilización de óxido nitroso y mejoras que impiden a la policía usar sus armas contra ti. Vamos, un estado salvaje que a veces no saldrás bien parado, aunque normalmente libre de obstrucciones por lo que el «pique» se libra con otros sistemas, como salirse por accesos directos. Se inaugura un nuevo modo de puntuación. En caso de que la policía te detenga, perderás los llamados «speed points», que se pueden usar para la customización de los vehículos, adquirir mejoras, cambiar de vehículo por uno más potente… Pero es recomendable ir a las guaridas para conservarlos, no sea que los pierdas y acabes con el contador a cero. Hay una nueva forma para desbloquear estos coches en caso de entrar en las llamadas «speedlists» unos desafíos personales en donde se arriesga y se juega todo a una sola mano. Cabe recordar que el juego permite jugar en solitario pero conectándose a internet las partidas mejoran sustancialmente. Uno puede entrar en partidas públicas, donde se compite contra corredores de todo el mundo, o privadas, pero solo en casa no pierde un ápice de intensidad.