Desde antes de la caída del Muro de Berlín, las películas y los best sellers occidentales pintaban a la Unión Soviética como un mundo adusto, vigilante y de gran exaltación patriótica.
Pero los jóvenes soviéticos no estaban todo el día uniformados y cantando himnos. Como sus contrapartes occidentales, disfrutaban con videojuegos y salas recreativas. Para recordar su infancia, tres jóvenes que fueron niños durante ese periodo, Aleksandr Stakhanov, Maxim Pinigin y Aleksandr Wugman, decidieron reunir máquinas recreativas y videojuegos de los años 70 y 80.
Y de esa ilusión, nació en 2007 el Museo de las Máquinas Recreativas Soviéticas, con sede en Moscú y una filial en San Petersburgo. Han logrado hasta ahora reunir 40 distintas y han conseguido que más de la mitad funcionen. Estas máquinas fueron creadas en fábricas secretas militares, sostienen, desde los años 70 hasta los tiempos de la Perestroika.
Tetris
Se trata de la más universal de las creaciones soviéticas. El ingeniero Alekséi Pázhitnov, del Centro de Computación Dorodnitsyn, lanzó el primer modelo el 6 de junio de 1984. Pázhitnov se inspiró para crearlo en dos de sus hobbys: un rompecabezas que le encantaba (pentaminós) y el tenis, que era su deporte favorito. Está disponible tetris.com/play-tetris.
Morskoi Boi
Algunas de las máquinas recreativas soviéticas no eran exactamente videojuegos, sino juegos arcade electromecánicos. Es el caso de uno de los juegos que los rusos recuerdan con mayor cariño: el Morskoi Boi, un juego de guerra de submarinos (morskoy-boy.15kop.ru/game).
Es uno de los favoritos del Museo de las Máquinas Recreativas Soviéticas. Fue lanzado en 1974 y su funcionamiento es sencillo: un periscopio con una ventanilla a cada lado en la que se pueden ver moviéndose siluetas de barcos del invasor. Ya sólo queda mover el periscopio y lanzar un torpedo. Todo un entrenamiento por si la Guerra Fría se calentaba. Se dice que este juego se encontraba dentro de los submarinos soviéticos Typhoon para que los marineros lo usaran en sus tiempos de ocio bajo el mar.
Carreras de autos
Los jóvenes soviéticos soñaban con conducir esos Lada utilitarios que había por doquier o, yendo más allá, algún modelo más clásicos y elegantes como el ZIS-101 o una limusina Gaz-12. Mientras eso llegaba, podían entrenar sus habilidades con un auténtico videojuego de carreras (magistral.15kop.ru/game). Puede parecer arcaico, pero es muy difícil de jugar, según BBC Mundo.
Gorodki
Para jugar a este juego hay que meterse de lleno en la piel de los rusos. El Gorodki es un antiguo juego ruso parecido al boliche (gorodki.15kop.ru/game). En vez de jugar con una bola se juega con un palo que se tiene que lanzar contra un conjunto de palos cilíndricos colocados en distintas posiciones.
Este juego era practicado por el escritor Tolstoi y también por los líderes soviéticos Lenin y Stalin. También lo juega el actual presidente ruso, Vladimir Putin. Al ser tan popular, se decidió hacer un videojuego del Gorodki.
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